EXPERIENCIA ASENTADA REVOLUCIONARIA
Los estándares de Noblechairs crean una combinación inconfundible de estética, materiales lujosos y comodidad absoluta. Esto se debe en gran medida a la fabricación de precisión automatizada industrialmente, con el resultado final de una mezcla incomparable de artesanía impecable que ayuda a hacer que las sillas de los nobles sientan una alegría.
La atención al detalle que se desarrolló en el desarrollo de las sillas nobles EPIC se demuestra en el diseño en sí: un logotipo con relieve atractivo adorna el reposacabezas y un emblema elíptico de aluminio con letras atractivas.
ELEGANCIA Y ERGONOMÍA
Además de la impresionante estética de Noblechairs, se caracterizan por su forma distintiva y el uso de tapicería de espuma fría transpirable, resistente a la deformación y transpirable. El uso de esta espuma de alta densidad es lo que ayuda a la silla a mantener su forma durante largos períodos de tiempo, distribuyendo eficazmente la carga y evitando que los usuarios se hundan demasiado en la tapicería.
Instalados dentro de la cómoda tapicería de espuma fría, los usuarios estarán encantados de encontrar un marco de acero sólido. Esto es lo que le da al EPIC su estructura fuerte y estable. Si se requiere soporte adicional para el cuello y la zona lumbar, se incluyen dos cojines extraíbles con logotipos cosidos.
El mecanismo de balanceo completo con función de bloqueo permite a los usuarios relajarse en el ángulo perfecto con la ayuda de una palanca lateral. Esta palanca permite a los usuarios bloquear el ángulo entre el respaldo y el asiento del asiento, lo que significa que las sillas nobles EPIC permiten a los usuarios encontrar la posición sentada perfecta para una máxima relajación y comodidad.
BRAZOS 4D
Los reposabrazos 4D de noblechairs ofrecen la máxima capacidad de ajuste en cuatro dimensiones: horizontal, lateral, vertical (altura) junto con un ángulo de inclinación ajustable. Esto hace que lograr una ergonomía óptima en línea con su escritorio individual sea notablemente fácil.
