Las encimeras desempeñan un papel fundamental tanto en la funcionalidad como en la estética de la cocina. No solo ofrecen una superficie de trabajo práctica, sino que también contribuyen al estilo general del espacio.
Elegir la adecuada implica considerar factores como el diseño, la resistencia, el mantenimiento y su adaptación al ritmo de vida diario.
Por eso, te contamos todo lo que necesitas saber: qué son, los tipos que existen, cómo cuidarlas y qué elementos se complementan en una cocina actual.
Es una superficie de trabajo instalada generalmente sobre los muebles bajos de las cocinas. Su función principal es proporcionar un área estable para la preparación de alimentos, el uso de utensilios de cocina y la instalación de electrodomésticos como hornos y microondas.
Además de su funcionalidad, las encimeras cumplen un papel estético importante, ya que están disponibles en una variedad de materiales, texturas y colores que pueden transformar completamente el estilo de una cocina.
También deben ser resistentes al calor, la humedad y las manchas al estar en constante contacto con estos elementos.
Existen distintos tipos de encimeras diseñadas para adaptarse a las preferencias de cada persona. A continuación, te describimos los más comunes.
Las encimeras a gas funcionan con quemadores conectados a una fuente de gas. Son apreciadas por ofrecer un control de temperatura inmediato y preciso.
También son ideales para quienes disfrutan de una cocina más tradicional o profesional, aunque requieren una buena ventilación.
Las encimeras eléctricas utilizan resistencia eléctrica para generar calor. Su diseño plano facilita la limpieza y su aspecto moderno combina con cocinas minimalistas. Aunque suelen tardar más en calentar, son muy seguras al carecer de llamas abiertas.
Parecidas a las eléctricas, pero los modelos de inducción utilizan campos magnéticos para calentar directamente el recipiente. Son eficientes, rápidas y seguras, aunque requieren ollas y sartenes especiales compatibles con la tecnología de inducción.
Estos modelos cuentan con una superficie lisa de vidrio templado que aporta un acabado moderno. Funcionan mediante resistencias eléctricas que calientan zonas específicas bajo el cristal, transmitiendo el calor de forma gradual.
Este tipo permite combinar diferentes fuentes de calor: gas, eléctrica, grill, entre otras. Son perfectas para cocinas personalizadas o para quienes buscan versatilidad en un solo espacio.
El mantenimiento correcto prolonga su vida útil y mantiene su apariencia como nueva. Aquí te dejamos algunas recomendaciones:
En definitiva, la elección de la encimera influye en la comodidad al cocinar, en la organización del espacio y en la estética general del ambiente. Por eso, merecen un lugar central en cualquier proyecto culinario.