Coolers y Neveras 

¿Por qué elegir un cooler?

• Aislamiento: Los coolers cuentan con materiales aislantes que ayudan a mantener la temperatura interna estable y prolongan el tiempo en que los alimentos permanecen fríos.
• Capacidad: Varían en tamaño desde pequeños enfriadores portátiles hasta grandes cajas de almacenamiento.
• Portabilidad: Diseñados para ser fácilmente transportables, con asas, correas o ruedas en algunos modelos.
• Durabilidad: Fabricados con materiales resistentes a impactos y a las condiciones exteriores para garantizar una larga vida útil.

Tipos de coolers

1. Eléctrico: Un cooler eléctrico ofrece toda la comodidad para que tu día de descanso sea ideal. Olvídate de la preocupación por cambiar el hielo o si tus snacks se derriten.
2. Caja o contenedor: Cuentan con tapa hermética que ofrecen mayor capacidad y mejor retención del frío. Algunos modelos incluyen compartimentos adicionales para hielo o packs de gel. Son perfectos para viajes largos, eventos al aire libre y transporte de grandes cantidades de alimentos.
3. Cesta térmica: También conocidas como loncheras térmicas, son cestas con aislamiento que conservan los alimentos y bebidas frescos durante varias horas. Ligeras y con una estructura rígida, son perfectas para llevar en un bolso de viaje o una mochila de trekking para excursiones cortas.
4. Gel o pack de hielos: Utilizan paquetes de gel o hielo para enfriar los contenidos. Los packs de gel se congelan previamente y se colocan en el cooler para mantener el frío.

¿Cómo mantener tu cooler?

1. Limpieza Regular: Limpia el interior y el exterior del cooler después de cada uso. Utiliza agua tibia con jabón suave y un paño o esponja no abrasiva para eliminar residuos de alimentos y bebidas. Asegúrate de secarlo bien antes de guardarlo para prevenir la aparición de moho.
2. Almacenamiento adecuado: Guarda el cooler en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa. Si es posible, deja la tapa entreabierta para permitir la circulación de aire y evitar la acumulación de olores o humedad en el interior.
3. Protección de sellos: Revisa periódicamente las juntas y los sellos de la tapa para asegurarte de que no estén dañados. Un buen sellado es esencial para mantener su eficiencia.
4. Evitar el uso de objetos punzantes: Evita colocar objetos afilados o pesados directamente sobre el interior del cooler. Utiliza bolsas protectoras para los cubiertos u otros elementos que podrían perforar o dañar su interior.
5. Refrigeración previa: Antes de usarlo, enfríalo colocando hielo o paquetes fríos durante 30 minutos a una hora. Esto ayudará a mantener las bebidas y alimentos frescos por más tiempo.

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