Un bebé duerme entre 15 y 20 horas al día en promedio. Por lo tanto, es sumamente importante que elijas con cuidado su ropa de cama, ya que pasará la mayor cantidad del tiempo en esta actividad y ésta debe ser lo más cómoda y segura posible. Preocúpate de que sea de algodón, ya que al ser una tela natural, permite una mejor ventilación de la piel y casi nunca genera reacciones alérgicas. Es importante también que la ropa de cama se ajuste perfectamente al colchón, que haya un espacio entre éste y los bordes de la cuna que no supere los dos dedos de ancho y por último, a la hora del lavado, usa producto que no irriten la sensibilidad de la piel de tu bebé.
Casi tan importante como la comida misma, es el ambiente en donde tu bebé la comerá. Preocúpate que éste sea relajado, de temperatura agradable, sin interrupciones o distracciones como música ruidosa, gente hablando fuerte, el televisor encendido o juguetes a la mano. Los niños generalmente suelen concentrarse en una cosa a la vez, y además, si logras crear un entorno agradable, conseguirás que tu hijo asocie comer con algo placentero.
El momento del baño es otra de las instancias para la que debes prepararte junto a tu bebé. Primero que todo, antes de sacarle la ropa, preocúpate de aclimatar el baño o el lugar en donde lo bañarás adecuadamente, para así evitar un resfrío. Segundo, prepara también el agua, probando con tu dorso de la mano o codo si es que la temperatura está correcta. Por último, ten todo lo que necesitarás a lo largo del baño a mano (jabón, esponja, toalla, pañales, ropa de vestir limpia, etc), ya que lo más importante es que una vez que lo estés bañando y al momento de vestirlo, no lo desatiendas ni un solo momento.
Para ir de paseo al aire libre o poder hacer cosas con tu bebé a cuestas pero con las manos libres, los portabebés son una opción más que recomendable. ¿Pero en qué fijarse al momento de elegir uno? Primero, asegúrate que sea ergonómico. Esto significa que las piernas de tu hijo deben estar siempre en posición “M” o de ranita. Segundo, el bebé nunca debe ir mirando hacia el exterior, ya que solo así se mantiene la curvatura natural de su espalda, que debe ser en forma de “C”. Y por último, fíjate en cómo se reparte el peso en el cuerpo del porteador, ya que la sensación al transportar al bebé no debe ser la de llevar una carga colgando en el cuerpo, sino la de estar abrazándolo.
La seguridad de tu bebé es importantísima a la hora de viajar en auto, y su sillita sin dudas es la que se lleva el protagonismo. Para seleccionar la correcta, lo más importante es que cuente con un certificado de seguridad vigente en Europa o EE.UU. Sin este sello, mejor ni aventurarse en adquirir una.
Sin duda que una de las cosas que más hacen los bebés es, además de dormir, jugar. Y si a esto le agregamos algo de actividad física, entonces tenemos un 2x1 perfecto. Los correpasillos son ideales para compatibilizar estas dos cosas, ya que mientras tu hijo juega está fortaleciendo sus piernas, mejorando su coordinación y preparando su motricidad para la hora en que camine solo. Al momento de elegir uno, ten en cuenta que la estabilidad del correpasillos sea robusta, que sea de construcción sólida y con seguridad comprobada.
Elegir las prendas de ropa adecuadas para tu bebé es algo muy importante, ya que de esto dependerá su comodidad y tranquilidad. Ten presente que es mejor que algo le quede grande a que le quede chico y, sobretodo, siempre privilegiar las prendas confeccionadas con telas naturales por sobre las sintéticas, ya que las primeras le permiten a su piel respirar. Además, preocuparse que sean fáciles de poner y sacar, que no tengan etiquetas ni costuras que puedan molestar o irritar a tu bebé y por último, lavarlas con un jabón o detergente específico para bebés o para piel delicada.
Sabemos que ahora que eres madre, te toca andar trayendo todas las cosas que tu bebé necesita de un lado para otro. ¡Y que no son pocas! Pero tranquila, que para esto están los bolsos maternales. Solo preocúpate que éste sea de un material resistente, con costuras reforzadas, ojalá impermeable y lavable. Si lo vas a usar para salidas cortas, como ir al médico o al supermercado, que no sea muy grande, si es para salidas más largas, entonces busca uno de tamaño mayor. Para finalizar, que tenga varios tipos de compartimentos para guardar todo lo necesario y que sea cómodo, para que puedas llevarlo colgado contigo o en el coche sin problemas.