La once es, sin duda, una de las prácticas alimentarias que distingue a Chile de otras comunidades nacionales. Un momento, un espacio, una mesa y unos ingredientes que varían de región en región, pero que siempre hablan de un comensalismo colectivo, familiar o entre amistades, de un "universal" compartido. Sin embargo, la "Once Huacha" propuesta en este ensayo por Sonia Montecino y Cristian Foerster desborda los confines identitarios y, entre lo dulce y lo salado, lo amargo e incluso lo agrio, emerge cómo un modo de encuentro y de diálogo. Un posible camino - entre la filosofía, la antropología, los mitos y las obras literarias - para reflexionar de manera crítica en torno al alimento y los distintos problemas enmarañados a su producción, distribución y consumo, vislumbrando modos de transformar desde el presente las complejas tensiones que se avizoran en el futuro.