Comienza entonces para los dos amigos un vagabundeo que les lleva de París a Berlín (donde Frank es víctima de un secuestro), después a Hamburgo y finalmente a los Estados Unidos, a la lujosa y nefasta mansión de los Pierson. Allí, frente a su destino, el frágil joven ¿podrá seguir los pasos de Ripley, el cínico, o cederá bajo el peso de su sufrimiento moral? Por primera vez, Tom Ripley revela al lector su cara oculta: la de un hombre generoso, dispuesto a todo para ayudar a un ser en apuros. Y también por primera vez Patricia Highsmith se dedica a reconstruir el universo de un adolescente atrozmente atormentado por un acto que cometió pero también rebelado contra la sociedad y tremendamente desgraciado a causa de una historia amorosa. «Una obra de escalofriante intuición y gran profundidad, aunque no haga alarde de ello... Como Graham Greene, Patricia Highsmith sabe que no necesita gesticular. El logro mayor de una escritora incesantemente fascinante» (Craig Brown, Times Literary Supplement).