El sensor para oxímetro de pulso pediátrico es esencial en la atención médica de niños y niñas, permitiendo la monitorización precisa de la saturación de oxígeno en la sangre. Su correcta colocación en un dedo y la interpretación adecuada de las lecturas son fundamentales para detectar posibles problemas respiratorios. Este dispositivo proporciona una herramienta vital para los profesionales de la salud, permitiendo una intervención temprana en casos de hipoxemia u otros trastornos respiratorios pediátricos, garantizando así un cuidado óptimo y la salud del infante.