Gracias a Shino, los tres se salvaron de tomar clases de reposición en el verano. Pero a cambio de eso, ¡ahora ella también vive en casa de Naoya! Y así, con Shino como la cuarta inquilina, ha comenzado la vida de todos en conjunto. Sus sentimientos por Naoya afloraron sin que se diera cuenta, ¡y ahora está a punto de besarlo! Y justo en ese momento, llegó Saki…