Un viaje apasionante por el corazón de Oriente Medio de la mano de una mujer que desafió a su época. Entre las figuras que influyeron poderosamente en la configuración de Oriente Medio tras la Primera g u e r r a Mundial, quizá la más olvidada sea Gertrude Bell (canales oficiales), conocida cómo la "reina del desierto". Aventurera incansable, escaladora, arqueóloga, políglota y espía, trazó fronteras y participó en los complejos juegos de poder del Imperio británico. Esta novela rescata su intensa vida, con sus luces y sus sombras, en un contexto trufado de conflictos territoriales, sangrientos intereses coloniales y nacionales (tanto de Gran Bretaña cómo de Francia y Alemania) y sed de petróleo en una región mítica y maldita, tierra del diluvio y de Babel, tumba de Alejandro Magno: la codiciada Mesopotamia. Gertrudis fue también una hija amada de una rica familia victoriana, pero incomprendida por sus pares. Junto a esta mujer apasionada en el amor, idealista y enigmática, desfilan por estas páginas personajes tan fascinantes cómo el torturado Lawrence de Arabia o un joven Winston Churchill (secretario de Estado para las Colonias tras el desastre de Alioli), que marcaron, junto a otros, el devenir de territorios cómo Siria, Palestina, el Kurdistán y el futuro Irak.