Daigoro conoce a una niña que es maltratada por sus amos, tanto el dolor padecido por la niña como la soledad del cachorro unen a estos dos seres hasta el grado de compartir la comida, sin embargo, ella no camina por Meifumado. Los Yagyu preparan el último ataque velado contra Itto Ogami, se juegan su última carta escondida antes de hacer pública la venganza; asesinados todos los hijos de Retsudo, solo queda alguien capaz de pelear. También los últimos kurokuwa se unen a la cacería, aunque el líder tiene algo muy importante que decirle al ronin antes de siquiera levantar su espada: esta vez el secreto de la Carta de Yagyu podría ser descubierto. La desesperación hace que hasta los cazarrecompensas vayan tras el Lobo que lleva a su cachorro.
