El protector térmico es un producto capilar diseñado para proteger el cabello del daño causado por herramientas de calor como secadores, planchas y rizadores. Su función principal es crear una barrera que reduce el impacto del calor extremo, evitando la deshidratación y la fragilidad de las fibras capilares.
Usar un protector térmico antes de aplicar calor, ya sea que uses una onduladora de pelo o un secador de pelo profesional, este no solo mantiene la salud del cabello, sino que también mejora su apariencia.
Este producto está formulado para soportar temperaturas de hasta 230°C, protegen la estructura capilar, además contienen ingredientes como aceites naturales, queratina y proteínas que fortalecen el cabello.
Además, gracias a su fórmula especializada, este producto ayuda a reducir el frizz, aporta brillo y previene las puntas abiertas, manteniendo la melena suave y manejable.
Incluso, no dejan residuos pegajosos ni apelmazan el cabello, manteniéndolo flexible y natural, como también ayudan a controlar la humedad y el encrespamiento, dejando un acabado brillante.
Dependiendo de su formato y composición, los protectores térmicos pueden encontrarse en distintas presentaciones, adaptándose a las necesidades de cada tipo de cabello.
Este formato es el más ligero y fácil de aplicar, sin dejar de mencionar que su textura permite una distribución uniforme sobre el cabello, sin dejar residuos grasos. Es ideal para cabellos finos y normales, ya que protege sin aportar peso.
Los protectores con texturas de crema para el cabello, están formulados con ingredientes nutritivos, por ende, este tipo de protector es perfecto para cabellos gruesos o dañados. Incluso, su textura más densa aporta hidratación profunda y ayuda a suavizar la fibra capilar.
Este tipo está creado para cabellos secos y con tendencia a la deshidratación, el protector en aceite ofrece una capa extra de nutrición. Además de proteger del calor, aporta brillo y controla el frizz.
Aplicar el protector térmico de manera adecuada es clave para maximizar su efectividad. Sigue estos pasos para lograr una protección óptima:
El protector térmico es un producto esencial para el cuidado capilar, sobre todo para quienes usan herramientas de calor con frecuencia. Su aplicación correcta protege el cabello del daño, mantiene su hidratación y mejora su apariencia. Incorporarlo en la rutina diaria es la clave para una melena sana y radiante.