El cedro del Atlas, utilizado en perfumería desde el antiguo Egipto, se combina maravillosamente con las notas aterciopeladas de sándalo y alcanfor-pachulí que le confieren todo su misterio. Constituye un auténtico acorde amaderado, seco y vibrante.
Notas perfumadas: Enselvado-oriental-Cálido. Notas altas: Cedro / Pachulí. Notas de corazón: Eucalipto / Pino / Jacinto. Notas de fondo: Sándalo / Vainilla