Dimensiones: 13 cm (altura) x 6.5 cm (anchura) x 7.5 cm (longitud)
Esta exquisita imagen de Eres, con una altura de 13 cm, es mucho más que una simple figura decorativa; es una manifestación artística de profunda significancia espiritual. Cada pieza es una obra original y exclusiva, meticulosamente elaborada para capturar la esencia y la energía de la divinidad.
La pieza está fabricada con resina de poliéster de alta calidad, un material reconocido por su resistencia y durabilidad, lo que garantiza que esta obra de arte conserve su belleza a lo largo del tiempo. La resina permite capturar detalles finos y texturas, dando vida a la figura de Eres con una claridad y realismo excepcionales.
Cada imagen es creada a mano por artesanos expertos, lo que añade un valor único a cada pieza. El proceso de pintado también se realiza manualmente, lo que puede resultar en ligeras variaciones en la tonalidad de los colores. Estas variaciones no son defectos, sino características que hacen que cada pieza sea única y especial.
La atención al detalle es primordial en cada etapa del proceso de creación. Desde la escultura inicial hasta el último toque de pintura, cada paso se realiza con cuidado y precisión para asegurar la más alta calidad.
Esta imagen de Eres es una representación artística que lleva el tema religioso de la Umbanda y el Candomblé a su entorno. Eres, conocido como el orixá niño, simboliza la alegría, la inocencia y la pureza. Tener esta imagen en su hogar o espacio sagrado puede servir como un recordatorio constante de estas cualidades positivas.
A pesar de ser una escultura tipo estatua, no viene con una base, lo que le otorga una gran versatilidad. Puede ser colocada en diversas superficies y ambientes, desde altares y estantes hasta mesas de noche y escritorios. Sus dimensiones compactas permiten que se acomode fácilmente en una variedad de espacios, añadiendo un toque de espiritualidad y belleza a cualquier entorno.
Este producto de alta calidad es mucho más que una simple imagen; es una obra de arte que lleva la belleza y la fuerza de la religión a su espacio. Cada pieza es un testimonio del talento y la dedicación de los artesanos que la crearon, y un símbolo de la rica tradición espiritual que representa.
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