Dentro de la ilustre Colección Ecuestre, donde las fragancias reflejan la gracia enérgica del mundo equino, Chevalier sale de la botella como un semental carismático.
Imagínese una mañana soleada en los establos, donde Chevalier comienza su viaje olfativo con notas de salida vigorizantes. Limón, naranja, cardamomo, enebro y pimiento bailan juntos como el brinco vivaz de un noble corcel, despertando los sentidos con una explosión de energía.
A medida que la fragancia se asienta, se despliegan notas medias de lavanda, salvia y geranio: una cortina fragante que refleja la paz de un paseo por campos de flores silvestres. Cada nota captura la esencia del suave galope de un caballo bajo un cielo vasto y abierto.
El viaje concluye con las notas de fondo de la madera de cedro, el pachulí, el vetiver y el caprilol. Estas notas de fondo reflejan el reconfortante aroma del establo, mientras que la fragancia del heno y el barro permanece, un testimonio del vínculo duradero entre el jinete y el corcel.
Chevalier no es solo una fragancia; es una sinfonía de aromas que rinden homenaje a la conexión eterna entre los humanos y los caballos. Que cada rociado sea un recordatorio de la elegancia enérgica del viaje de un Chevalier.
Notas de fragancia
Notas de salida: limón, naranja, cardamomo, enebro, pimiento
Notas de corazón: higo, lavanda, salvia, geranio.
Notas de fondo: madera de cedro, pachulí, vetiver, cipriol.
