El descuadre y contracción natural del material en puertas y ventanas produce rendijas y con ello filtraciones deseadas desde el exterior. La instalación de aislantes o guardapolvos, ayuda a mantener una temperatura estable dentro del hogar, ya que evitan que entre el aire frío a las habitaciones y en el verano preservarlas contra las altas temperaturas. Además, son capaces de aislar ruidos exteriores, reducir el ingreso luz, olores, polvo por debajo de la puerta y la lluvia.
Atributos destacados
- Se utilizan para compensar desajustes en tus puertas y ventanas.
- Protegen del frío, de corrientes de aire, del calor, del polvo, entre otros elementos.
- Producto de primera calidad, de fácil instalación con cinta adhesiva o tornillos.
- Fabricado con materia prima resistente a sustancias alcalinas como el detergente.
- Permite fijarlo a las aberturas y también removerlo al momento de renovarlo.